«Ser un gremio abierto y cercano a su comunidad no es un slogan, es una realidad». Este lema se consolida día a día a través de la Campaña Solidaria Permanente que lleva adelante nuestro Sindicato de Luz y Fuerza de Rosario.
En los últimos días, hicimos entrega de alimentos dulces y ropa al Centro Comunitario Iluminados por los Chicos de la ciudad de Rosario para que puedan brindarles a los niños y niñas que allí concurren y para que tengan un momento distinto y sumar al trabajo que cotidianamente realizan por nuestras infancias más vulnerables.
La entrega fue encabezada por la Secretaria de Derechos Humanos, Género e Igualdad, Gabriela Cericola, quien fue acompañada por compañeras y compañeros de nuestro gremio.
Solidaridad que no cesa
En el marco del Día de la Niñez, fuimos por un objetivo noble: brindar alegría y sonrisas a los niños y niñas en su día. La campaña se nutrió de la generosidad de los miembros de nuestro sindicato y de aquellos que lo conforman en un acto de colaboración que demostró que juntos podemos hacer la diferencia. Así, juntamos juguetes y alimentos que se han ido repartiendo en diferentes lugares, llegando a más de 1.200 niños y niñas de diferentes instituciones de la ciudad y la región.
En una de las salidas y entregas, estuvimos presente en el Comedor Mis Ángeles de Rosario, en el Hogar San Cayetano de la ciudad de Casilda y en el Hogar Astengo de la vecina localidad de Alvear.
Luego estuvimos presente en Piecitos Descalzos de Villa Gobernador Gálvez, el comedor y merendero Juntos Podemos de barrio Alvear de Rosario y el Centro Intercultural Francisco Moreno en Barrio Cacique Moreno de Granadero Baigorria.
Mientras que además se llegó con regalos y golosinas a Alas para Crecer, merendero Francisca Francisca, institución Tus Sueños y Hogar San Héctor.
Además, se colaboró con los comedores «Francisca Francisca» y «El Alfarero» de Rosario.
Con la consigna «Luz y Fuerza somos todxs», este gremio demuestra que la solidaridad es una parte fundamental de su identidad. No se trata simplemente de palabras vacías, sino de un compromiso real y tangible con el bienestar de su comunidad. En tiempos donde el individualismo a menudo prevalece, Luz y Fuerza brilla como un ejemplo inspirador de lo que se puede lograr cuando las personas se unen con un propósito común: hacer del mundo un lugar mejor.